La diabetes produce alteraciones vasculares y neurológicas, riesgo cardiaco u ocular entre otros, así como diversos síntomas. ¿Te has preguntado por qué uno de ellos es una sed intensa?
La polidipsia, definida como la necesidad de consumir líquidos con frecuencia y abundantemente, es un mecanismo fisiológico que se activa para evitar la deshidratación. Éste es uno de los primeros síntomas de la diabetes y se acompaña con sensación de resequedad en la boca.
Las causas de la polidipsia son muy diferentes, pero en el caso de los pacientes diabéticos ocurre debido al incremento de la necesidad de orinar. Esto se genera a causa de un aumento en la dilución de la orina para disminuir su alta concentración debido a la presencia de la glucosa en la misma.
Por lo tanto, al absorber más líquido a través de los riñones, se incrementa la frecuencia y el volumen de la orina, en consecuencia, tiene lugar una gran pérdida de líquido que deriva en deshidratación. Para tratar de contrarrestarla, el organismo envía una señal al cerebro mediante diferentes hormonas a fin de activar la sensación de sed.
La cantidad de líquido ingerida se relaciona con la pérdida de agua a través de la orina, así como con los niveles de glucosa. En casos agudos pueden ser síntomas que se presenten de manera simultánea, mientras que en casos moderados pueden pasar inadvertidos por los pacientes.
Todos hemos experimentado más de una vez en la vida la sensación de estar sediento, sin embargo, es importante diferenciarla de la presencia de polidipsia. La persistencia de la sed sin importar la cantidad de agua que se ingiera y la presencia de más de 3 litros de orina al día nos indican que estamos presentando polidipsia. Si tienes estos síntomas y persisten por varios días, consulta a tu médico para evaluar tu medicación.
Fuente: DiabeTv / Dra. Sabrina Pozzobon