Las personas con diabetes tienen en ahora en sus manos las mejores posibilidades para mantenerse sanas si cuidan de sí mismas sin renunciar a vivir lo mejor posible… Muchos estudios han demostrado que también puedes ayudar a prevenir los problemas a largo plazo ocasionados por el padecimiento, como la cardiopatía, el daño a los nervios, las enfermedades renales y los problemas oculares, al mantener tus niveles de glucosa en la sangre dentro de unas cifras adecuadas.
Aquí están algunas de las más frecuentes disculpas que solemos poner para no cuidar de nosotros mismos:
1. Nunca tengo tiempo suficiente
Cuidar de sí mismo lleva tiempo. Pero ¿acaso tu futuro y tu salud futura no valen unos cuantos minutos al día? Cuando se trata de comer saludablemente y ser más activos, no hay mejor momento que el presente. Tú vales mucho más que el tiempo que te llevará cuidar de ti mismo.
2. No tengo suficiente dinero para hacer todo esto
Cuidar de tu diabetes es algo caro, pues una alimentación sana y variada no es precisamente lo más barato hoy en día. Pero también son muy costosas las complicaciones de la diabetes, tanto en términos de calidad de vida como de costo social. Haz una lista de lo que quieres hacer y de lo que puedes hacer, a lo mejor es cuestión de priorizar mejor los gastos.
3. Medir mis niveles de glucosa o ponerme insulina es doloroso
Ya sea que simplemente estés controlando tu nivel de glucosa, estés poniéndote inyecciones de insulina, o ambos, es muy probable que no te guste pincharte con agujas. Para reducir el dolor al controlar tus niveles de glucosa, pregunta a tu médico acerca de los medidores que puedes utilizar en lugares alternativos a tus dedos, como en el antebrazo o la palma de la mano. Asimismo, pídele orientación sobre si estás utilizando el método y las lancetas que ocasionan menos dolor.
4. No me gusta medir mis niveles de glucosa o ponerme insulina en público
A mucha gente no le gusta. Puede que te sientas más cómodo si encuentras un lugar privado, como un baño. Otras personas aprenden a inyectarse y a medir su glucosa discretamente, para que pocas personas lo noten. Recuerda que tener diabetes no es una razón para avergonzarse. Te sorprenderías al saber que muchas personas a tu alrededor también la tienen. Recuerda que ésta podría ser la oportunidad de enseñarle a alguien más acerca de la diabetes.
5. Me gusta caminar descalzo por la casa
Caminar descalzo, incluso en casa, aumenta la probabilidad de lesionar tus pies al exponerlos a objetos de todo tipo que pueden estar por los suelos y pasarnos inadvertidos. Una lesión puede ocasionar una herida que no cure o tarde mucho en hacerlo ¿Sabías que la mayoría de accidentes suceden en casa? Por lo tanto, necesitas proteger sus pies.
6. Esos zapatos son muy feos
Todo el mundo necesita proteger y mimar sus pies y mucho más las personas con diabetes y con la variedad de artículos para escoger que existen hoy en día es más fácil encontrar un zapato que se acomode tanto a tus necesidades como a tus gustos Aunque la moda actual es antianatómica y en muchos de los zapatos el pies está aprisionado en vez de alojado relajadamente como debería estar, me estoy refiriendo en concreto a esos zapatos de punta muy afinada. Puedes hablar con su educador en diabetes para averiguar las mejores marcas y los distintos establecimientos donde adquirirlos.
7. Olvidé traer mis suministros
Sí, puede ser a veces difícil recordar todas las cosas que tienes que llevar para el cuidado de tu salud, tu medidor, las tiras, las pastillas y la insulina, pero ayuda ser un poco más organizado y planear con anticipación. Puede resultar útil tener suministros suplementarios para mantener en el trabajo o llevar consigo al salir. Recuerda mantenerlos en un lugar donde el calor y el frío no los dañen.
8. Nunca he realizado actividad física
No puedo empezar ahora. Aunque no lo creas, incluso sólo un poco de actividad física puede ser muy benéfico. ¿Por qué? Las investigaciones han comprobado que unos 30 minutos diarios son muy útiles. Y lo mejor es que ¡no tienes que hacerlo todo al mismo tiempo! Puedes obtener los mismos beneficios para tu corazón si permaneces activo durante 10 minutos, tres veces al día.
9. No importa lo que haga acabaré teniendo complicaciones
Simplemente porque un familiar o alguien que conoces han tenido problemas o complicaciones graves con la diabetes, no significa que deba sucederte a ti también. Es casi imposible cuidarse bien a sí mismo todos y cada uno de los días si no crees en lo que estás haciendo.
Fuente: CliniDiabet