
Los resultados publicados en la revista New England Journal of Medicine, revelaron que después de experimentar insertando los genes modificados en las células de ratones se aceleró su metabolismo y disminuyeron su masa corporal hasta un 50%, a pesar de estar dormidos y de que fueron sometidos a una dieta alta en carbohidratos;
Con esto los investigadores demuestran la posibilidad de controlar el proceso de acumulación y de gasto grasas y cambiar el metabolismo modificando el ADN implicado en la termogénesis y el almacenamiento de lípidos.
Este avance médico es de gran importancia debido a que la obesidad es una enfermedad que afecta a más de 500 millones de personas en todo el mundo y es la responsable de otros males como la diabetes, desordenes cardiovasculares y cáncer, entre otras.
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