
DexCom es la compañía encargada del desarrollo de la aplicación, y ha explicado que su herramienta medirá esos niveles cada 5 minutos gracias a un sensor que se colocará bajo la piel del paciente. La app, que también llegará en abril, mostrará su evolución mediante un gráfico que aparecerá en la pantalla del reloj.
La meta es que los diabéticos hagan sus mediciones de glucosa de la manera más fácil y rápida posible. Esta misión parece ser un reto común para las tecnológicas ya que Google anunció el año pasado que pensaba lanzar unas lentillas inteligentes con una función similar.
Estos movimientos enfocados en la salud, reafirman el objetivo del Apple Watch en no quedarse en un mero reloj inteligente y convertirse también en un dispositivo centrado en la salud y el bienestar. Y es que el HealthKit de Apple ya ha comenzado a coger peso en los hospitales de EEUU como sistema de monitorización de los pacientes