
El kiwi es originario de China (conocido como “Yang Tao”), en donde no sólo era popular por sus beneficios nutricionales, sino también por sus propiedades medicinales. Se introdujo a Nueva Zelanda por misioneros a principios del siglo XX, y fue en dicho país donde se popularizo su cultivo y se le denominó con el nombre de un ave local: el kiwi.
Poco a poco se ha ido conociendo y popularizando en todo el mundo. En la actualidad, países como Chile, Francia, Italia, Japón y Estados Unidos son los mayores productores en el mundo; cultivando dos variedades: verde y “dorado”.
Beneficios para la salud
1) Tiene 3 veces la recomendación diaria de vitamina C, casi 5 veces el contenido de una naranja.
2) Proporciona un excelente aporte de vitaminas K (necesaria para procesos de coagulación sanguínea), A (función visual, piel y huesos), E y B6.
3) Es fuente de electrolitos y minerales como potasio, magnesio, hierro y cobre.
4) Sus pequeñas semillas son fuente de omega 3.
5) Contiene sustancias antioxidantes en cantidades similares a la naranja y la toronja.
6) Es una buena fuente de fibra dietética.
7) Bajo índice glicémico.
8) Contiene actindin, una enzima que ayuda a la digestión de las proteínas y a una mejor función digestiva.
Fuente: DiabeTv / Dr. César Giral